tiempo estimado de lectura : 8

14. El primer Rey, Jenade.


Los dos codiciaban la calidez del otro, por lo que ni siquiera cenaron. 

Elisa estuvo en estasis hasta el amanecer y se quedó dormida como si se se hubiera desmayado. 

Sin embargo, Richard apenas podía conciliar el sueño y estaba mirando a Elisa en silencio.

Cuidadosamente cubrió los hombros blancos de Elisa expuestos fuera de la manta. 

Aunque la habitación estaba tibia por el calor de la chimenea, ella podría sentir frío porque había sudaba mucho. 

En el momento en que estaba arreglando cuidadosamente el cabello enredado de Elisa ella habló. 

— Richard... 

Elisa murmuró su nombre en sueños, y al encontrar su calor lo abrazó. 

Como sino quisiera dejarlo ir, ni siquiera en sueños. 

Al mismo tiempo, el corazón de Richard comenzó a latir con fuerza y se aferró violentamente al calor de su toque. Se sintió aliviado cuando la respiración de Elisa volvió a la regularidad.

Pero la calidez de su toque en sus brazos lo estimuló, haciéndole pasar dificultades. 

— Hmm... 

Después de tragar saliva por un momento, Richard envolvió de nuevo el cuerpo de Elisa en la manta, que se había deslizado fuera de ella debido a los giros y vueltas de Elisa, y nuevamente la abrazó. 

Elisa estaba durmiendo tan plácidamente que nada en el mundo podría despertarla. 

Sin saber cuánto lo estimulaba ese rostro tan indefenso. 

Era una figura atrevida y encantadora al mismo tiempo. 

Entonces, de repente, recordó lo que dijo. 

"Porque soy tu esposa, haré cualquier cosa contigo. Ya sea en la felicidad o dificultad" 

No quiere alejarse de ella. Siente tanto cariño con tan solo verla, incluso cuando la toca, solo quiere tocarla más. 

Richard, que miró a Elisa dormida, prometió. 

Que ningún peligro puede vencer sus sentimientos por ella. Richard susurró, besando la frente de Elisa como si hubiera perdido. 

— Estaré a tu lado, Elisa. 

— Te amo. 

En ese momento, los párpados de Elisa se agitaron y luego abrió los ojos.

Elisa, que lo miró con ojos aún nublados por el sueño, sonrió y susurró. 

— Yo también te amo. 

Ante la respuesta que llegó como un regalo inesperado, los ojos de Richard temblaron, y Richard, que miró fijamente a Elisa por un momento, se acercó lentamente y besó sus labios. 

Los ojos de Elisa, que habían estado parpadeando lentamente sin poder vencer su somnolencia, estaban completamente cerrados.

Comenzaba otra larga noche. 


— Um... 

Elisa sintió que la luz del sol brillaba intensamente en la habitación y abrió los ojos fuertemente cerrados. 

Frente a ella, como de costumbre, Richard estaba durmiendo con ese hermoso rostro suyo.

'¿De quién es este marido, cómo puede lucir tan guapo desde la mañana... espera no, desde la mañana?'

Elisa, que había estado parpadeando lentamente con los ojos aún somnolientos, abrió los ojos con sorpresa cuando vio el reloj.

'¡Harness!'

Todo su cuerpo estaba adolorido y cansado porque estuvo siendo tomada por él hasta la madrugada, por lo que apenas y durmió, pero ante el recuerdo de Harness se le olvidó eso.

Harness, como cualquier niño de familia noble, tenía una niñera, pero Elisa lo estaba amamantando ella misma tanto como le fuera era posible.

Cuanto más tiempo pasaba con Harness, más se sentía conectada a su hijo, y Elisa también sentía la felicidad de convertirse en madre al compartir ese momento.

No tenía nada de qué preocuparse porque tenía una niñera, pero estaba incómoda porque se sintió como que había roto una promesa con su hijo. Así que pensó que debería darse prisa.

Sin embargo, el brazo de Richard sosteniéndola fuertemente era un problema.

'¿Por qué pesa tanto su brazo? ¿De qué tipo de roca está hecho?'

Elisa gimió, arrastrándose fuera del brazo y saliendo de la cama.

Y se puso su bata tan pronto como pudo.

En ese momento, una calidez apareció repentinamente por detrás rodeándola. Al mismo tiempo, una voz lánguida como si recién hubiera despertado del sueño le susurro al oído.

— ¿A dónde vas?

Richard apoyó su cara en el hombro de Elisa mientras hacía esa pregunta.

A medida que la distancia se acortaba, el cálido aliento hizo cosquillas detrás de su ya sensible cuello.

Elisa, que estaba nerviosa por la sensación, respondió un poco tarde.

— Con Harness...

— Más tarde.

Sus labios tocaron el cuello de Elisa. Luego, envolvió sus brazos alrededor de la bata de Elisa y la abrazó.

El toque fue suave, pero fue suficiente para que le evitara hacer cualquier cosa.

Richard aprovechó la oportunidad para deslizar un poco la bata de Elisa y besar el hombro blanco y al descubierto.

No quedó satisfecho con solo un beso por lo que continuó besando el hombro.

— Ah...

El cuerpo de Elisa temblaba cada vez que ese estímulo vertiginoso la tocaba.

La calidez que la rodeaba, su respiración, era tan estimulante.

Incluso escuchar el sonido de sus labios deslizándose era terriblemente tentador.

Elisa sabía lo que significaban sus acciones.

'¿Quieres... hacerlo de nuevo? Hemos estado haciendo eso toda la noche.'

Estaba exhausta de haber sido atormentada por él toda la noche.

Elisa se retorció en sus brazos y se movió nerviosamente.

— Richard, detente...

— Siento que cuando te abrazo, la energía negra desaparece.

Por supuesto que eso era una tontería. Elisa lo miró con una expresión enojada.

Cuando Elisa parecía no estar dispuesta a continuar, Richard la besó en la mejilla esta vez.

— Te dije que te quedaras a mi lado.

Estaba siendo un mocoso infantil.

Y sin embargo, se ve bastante lindo de esa manera.

Cuando Elisa mostró signos de vacilación sin alejarse, Richard no perdió la oportunidad y se acercó directamente a los labios de Elisa.

Luego susurró mientras la miraba como si la estuviera devorando con los ojos llenos de lujuria.

— No pienses en alejarte de mí.

Sus labios se acercaron y tomaron los de ella.

Elisa cerró los ojos rindiéndose ante el beso codicioso que parecía tomar todo lo que le faltó anoche.

Poco después sintió las suaves sabanas tocar su espalda.

El cálido sol de la mañana brillaba a los pies de las dos personas que se abrazaban sin dejar espacio entre ellos.


***

— Harness.

Fue hasta el mediodía que Elisa pudo ir a ver a Harness con Richard.

La niñera y las criadas habían estado observando a Harness, que estaba practicando volteretas con entusiasmo, pero él rompió a llorar cuando vio a Elisa, como si recordara de pronto que tenía hambre.

— ¡Pua!

— Lo siento, Harnnes, mamá vino tarde hoy, ¿no?

Elisa agarró a Harness de la niñera y se disculpó mientras lo abrazaba.

No dijo nada, pero el hombre que la retrasó sostuvo la pequeña mano de Harness.

Antes de salir de la habitación, la niñera y la criada se apresuraron a hablar sobre el crecimiento de Harness.

— Oh, por cierto, el joven maestro se levantó por la mañana y logró darse la vuelta de nuevo.

— Y no sabe lo orgulloso que está cuando se despierta por la mañana y no llora.

— Oh, mi bebé, ¿lograste girar de nuevo hoy? Eres tan bueno ahora. Estoy tan orgullosa de ti.

Elisa besó a Harnnes con amor.

Harness pareció dejar de llorar por un momento ante el gesto de afecto de su madre, pero pronto comenzó a quejarse de nuevo. Era hora de tomar leche.

La niñera y la criada se alejaron, y Elisa comenzó a amamantar al niño que lloraba, y el niño dejó de llorar como si nunca hubiera estado llorando concentrándose en comer.

Richard tocó suavemente con sus dedos el dorso de la pequeña mano de Harness.

Elisa, que miraba a Harness alimentarse con una expresión neutral, habló de repente.

— Richard, vayamos juntos a la Torre de la Verdad.

Richard miró a Elisa, que habló con una mirada determinada, y asintió.

— Bien. Pero ¿Qué pasa con Harness?

— Harness...

Los dos estaban angustiados mientras miraban a Harness, que estaba alimentándose de manera entusiasta con la leche.

Para llegar a la Torre de la Verdad, desde Akaroa, son necesarios cuatro días a caballo y un poco más si es en carruaje.

Era bueno que Elisa estuviera cerca de él en caso de que la energía de Richard se fortaleciera.

Sin embargo, el viaje sería pesado para Harness, quien aún no ha cumplido los 100 días.

Sin embargo, no se sentía bien dejar a Harness en la mansión.

Mientras los dos agonizaban por ello, Harness de repente abrió la boca mientras se alimentaba.

— ¿Ab-ah? Uh-huh.

— ¿Eh?

— ¡Abu! ¡Whoa!

Al escuchar sus balbuceos era como un: "¡Por supuesto que iré con ustedes!" ¿O era por la emoción que pensaban eso?

Harness, quien expresó con entusiasmo su propia opinión, se concentró en alimentarse nuevamente.

Elisa y Richard miraron a Harness con ojos desconcertados por un momento y finalmente sonrieron aceptando.

Que este pequeño y frágil niño de los dos es también miembro de la familia.



Unos días después, estaban listos para partir hacia la Torre de la Verdad.

Después de prepararse, Elisa y Richard fueron a la habitación de Harness.

Tan pronto como vio a Harnnes listo para el viaje, Elisa exclamó y abrazó al niño.

— Mi bebé, estás usando un atuendo muy lindo hoy, ¿no? Eres tan bonito.

Harness vestía un cálido traje de lana. La figura esponjosa se parecía a un peluche de oveja.

Además, los zapatos peludos que se usan en los pies que aún no pueden andar también eran muy lindos.

Frotando sus labios en la mejilla de Harness Elisa preguntó.

— Harness, ¿nos vamos ahora?

— ¡Gu!

Harness también parecía estar de mejor ánimo que de costumbre, sabiendo que hoy era el día de su viaje.

Justo a tiempo, se escuchó a Grayson tocar.

— Listo, señor.

Richard bajó al salón central de la mansión sosteniendo a Elisa por el hombro.

Los sirvientes y los caballeros de la mansión se habían reunido para despedir al maestro que iba a emprender un largo viaje.

Grayson despidió a las dos personas que estaban frente al carruaje.

— No se preocupen por este lugar, que tengan un buen viaje.

Los caballeros y los sirvientes inclinaron la cabeza al mismo tiempo para presentar sus respeto.

Elisa respondió con una sonrisa a sus palabras.

— Entonces nos iremos.

— Ubu... uh..

Richard dio una reverencia y Harness se despidió con un balbuceo, luego se subieron al carruaje que los esperaba.

Pronto, el carruaje que se dirigía a la Torre de la Verdad partió.


Lista de capítulos

Anterior - Siguiente


ESTE SITIO FUE CONSTRUIDO USANDO