Extra 1. Cómo curar las heridas
Después de la cena, Aiden, Olivia y Leon se quedaron un momento más para convivir antes de regresar a casa.
Después de bañarse, Elisa le dijo a la sirvienta que la estaba esperando que se podía retirar y de un lado del baño sacó la ropa para dormir que había preparado.
Era un traje de tela transparente que había comprado para el día de hoy.
'A Richard le va a gustar, ¿verdad?'
Elisa se sonrojó al pensar en Richard, quien se estremecería cuando la viera usando este atuendo.
Cada que lo seducía él se convertía en una bestia llena de energía que siempre se apresuraba a querer tomarla, lo que hacía que el corazón de Elisa latiera fuertemente cada que esto pasaba.
Elisa se vestía con mucho entusiasmo ante la idea de poder seducirlo, pero el malestar en su estómago la seguía molestando.
'No me siento bien...'
No parecía tener malestar estomacal, pero se sentía incómoda todo el tiempo, como si tuviera una indigestión.
'¿Será que pronto tendré la menstruación?'
Elisa solía perder el apetito y tener mala digestión inmediatamente después de empezar la menstruación.
Fue entonces cuando recordó que su menstruación tenía retraso de un mes.
Al mismo tiempo, recordó lo que dijo Olivia en la cena.
"Ustedes dos... No hay alguna buena noticia que no nos hayan dicho todavía, ¿verdad?"
Tal vez...
Elisa recordó aquella vez que mostró síntomas similares, pero pronto negó con la cabeza.
'Richard dijo que no quiere un segundo hijo todavía, por lo que debe haber estado preparado'.
Además, nunca ha tenido un ciclo muy regular, por lo que debe haberse retrasado un poco.
Elisa, que se había emocionado por un momento, se calmó de nuevo cuando se dio cuenta que las probabilidades eran escasas.
Se dirigió con entusiasmo a la habitación con la idea de poder seducir a Richard.
Cuanto entró a la habitación, vio a Richard leyendo un libro.
Elisa se acercó a Richard, mientras se aflojaba y quitaba suavemente el vestido transparente.
Richard, que se levantó del sofá y se acercó a Elisa, se detuvo al verla retirarse la ropa, tal y como ella esperaba.Él no aparté la mirada de ella.
Más bien, Elisa, quien planeó esta noche, evitó su mirada.
'Oh, esto me apenó. ¿Debería volver a ponerme la bata?'
Era la reacción que esperaba, pero cuando se encontró con su mirada, su rostro se calentó como una explosión.
Pero no era momento para echarse para atrás.
Elisa se acercó sigilosamente a Richard, que tenía los ojos distorsionados por el deseo, y sostuvo la cinta de la bata del traje que llevaba.
— Tu regalo soy yo...
Richard, que miraba el rostro de Elisa, sonrojado fuertemente por la vergüenza, dejó escapar un doloroso suspiro.
— Me vas a volver loco...
— ¿Acaso... no te gusta?
— ¿Me estás tomando el pelo?
Sin más tiempo que perder, Richard se levantó, y capturó los labios de Elisa en un beso.
Levantó a Elisa y caminó en dirección a la cama.Después de acostar a Elisa en la cama la besó con más avidez.
Como un orden natural, Elisa metió la mano entre la túnica de Richard y la colocó sobre su sólido pecho.
Más allá de la cálida de su cuerpo, pude sentir su corazón latiendo fuertemente contra su pecho.Un golpeteo que hacía feliz a Elisa.
Richard, que estaba aflojando la cinta de su traje, detuvo su mano y murmuró entre suspiros, como si hubiera recordado algo.
— No puedo excederme...
— ¿Eh?
Elisa lo miró, sin darse cuenta de sus repentinas palabras.Richard miró a Elisa con ojos preocupados y preguntó.
— Elisa, ¿cuándo fue la última vez que tuviste la menstruación? Por lo que puedo recordar, el tiempo ha pasado.
Elisa, parpadeando sin entender, se dio cuenta del significado de la pregunta un instante después y respondió:
— Hmm... creo que han pasado 10 días, un poco más. ¿Tal vez dos semanas?
— Dos semanas...
— Pero has estado tomando anticonceptivos, así que probablemente solo se retrasó un poco. Así que...
— Pudo haber un momento...
— El primer día que pasé en Rudea. No pude tomar el medicamento un día antes.
Ante las palabras de Richard, los ojos de Elisa se abrieron sorprendidos.
Cuando Richard estaba a punto de decir algo más, se escuchó un golpe.
Al escuchar el sonido, Richard levantó su cuerpo y cerró la bata de Elisa.
— Llamé a Sir Cetyl. Primero veamos a un médico. Incluso si no estás embarazada, no te sientes bien.
Después de que Richard le dijo que entrara, el médico Cetyl entró a la habitación.
Cetyl le preguntó a Elisa sobre algunos síntomas y malestares, y pronto comenzó a hacer una evaluación médica.
Elisa y Richard esperaron los resultados del examen con ansiedad.Después de un rato, Cetyl, que había terminado el examen, dijo.
— Felicitaciones a los dos. Un bebé está en camino.
No solo Elisa, que no lo había esperado, sino también Richard, que hasta cierto punto lo estaba esperando, quedaron bastante sorprendidos.
— Por el momento, será mejor que eviten las actividades al aire libre tanto como sea posible, y es mejor que se relaje.
Cetyl una vez más felicitó a los dos y salió de la habitación después de decirles algunas precauciones. Elisa, que estaba congelada con una mirada perpleja, finalmente puso sus manos temblorosas sobre su vientre.
'Tengo un bebé... tendré un segundo hijo.'
Richard, que estaba mirando a Elisa parpadear, tragó un suspiro de remordimiento.
Estaba feliz de tener un hijo, pero sentía pena por Elisa.Incluso cuando tuvo a Harness, sentía más pena por Elisa que alegría.
Porque podía adivinar que tendría sentimientos de ansiedad al tener un embarazo no planeado.
Fue por lo que decidió que el segundo hijo debería ser algo planeado. Pero al final, de nuevo volvió a ser algo repentino, debido a un descuido.
— Lo siento, Elisa. Fui descuidado...
— ¿Por qué lo lamentas?Elisa lo miró con alegría en los ojos y sonrió.
— Estoy tan feliz... Hubiera sido feliz si igual hubiera sido planeado, pero estoy más feliz ahora porque es como un regalo sorpresa. Hoy es tu cumpleaños, pero ¿por qué parece que soy yo quien obtuvo un regalo?
Ante la apariencia sinceramente feliz de Elisa, Richard también sonrió tranquilo.Luego la abrazó y la besó suavemente para expresar sus sentimientos.
— Siento que me han dado el mejor regalo que podría recibir de ti.
— Gracias, Elisa.
Richard, que estaba derramando sus emociones alrededor de los labios de Elisa, de repente notó su atuendo y exhaló, envolviéndolo en una manta.
— Entonces... tendremos que posponer este regalo por un tiempo.
Ante sus palabras, Elisa se echó a reír y lo besó en los labios.
— Te lo pagaré con un beso en su lugar.
Richard sonrió y tocó el vientre de Elisa.
Cuando tuvieron a Harness, estaba preocupado por Elisa que intentaba huir, así que estaba más ansioso que feliz.
Pero ahora que tenían a Harness, lo sabía. Qué hermoso es el niño que crece en el vientre de Elisa. Richard le susurró al niño, que aún era más pequeño que un dedo.
— Gracias por venir a mamá y papá.
Elisa, que lo miraba así con expresión tranquila, recordó a Harness que dormía en la otra habitación y preguntó con expresión preocupada.
— Si le digo que tendrá un hermanito menor, ¿le gustará a Harness? Todavía es joven, le gusta ser un consentido...
Richard asintió con la cabeza.
— A Harness definitivamente también le gustará.
— Necesito darle más abrazos y besos antes de que su hermanito nazca.
— ¿Más que ahora? Estará en tus brazos todo el día y no despegará sus labios de tí.
Elisa se rió de lo que dijo Richard. Luego, tomó la mano de Richard y la acomodó sobre su vientre, y con una expresión muy seria dijo.
— El bebé, ¿cuál será su Taemyung*?
Elisa, que lo estuvo pensando por un tiempo, dijo.
— ¿Qué tal 'un disparo'?
— Un... disparo.
— Significa que mi maravilloso esposo hizo a su hijo a la primera oportunidad sin perder el tiempo.
— No creo que eso sea correcto para decir.
Las orejas de Richard se pusieron rojas cuando escuchó el significado del nombre de nacimiento.
Verlo avergonzado, a diferencia de la bestia en que se convertía en la cama, hizo reír a Elisa.
Después de reír un rato, Elisa habló en serio esta vez.
— 'Deseo' será un buen taemyung para el bebé. Porque lo deseaba desesperadamente.
— Eso es bueno. También es mi deseo.
Elisa se apoyó en el hombro de Richard, satisfecha.
— Espero que crezca fuerte y saludable para conocer pronto a mi bebé.
Estaba seguro de que ahora serían doblemente felices, no... mas bien, serían cuatro veces más felices.
Richard sonrió y besó los labios de Elisa.
Elisa recibió su beso con un corazón feliz.
Ahora, cree que la primavera ya no será una estación dolorosa con recuerdos dolorosos, sino una estación llena de calidez y felicidad.
***
Ese invierno, un día antes de que el año acabara y el otro empezara.
Otro llanto de bebé estalló en el ducado de Rubelin.
Era el nacimiento de un pequeña que se parecía a Elisa.
Estoy a punto de divorciarme de mi marido villano, pero tengo un hijo.
Extra. Fin.
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Taemyeong (胎名) o nombre de nacimiento, es un nombre que una madre embarazada le da a un niño temporalmente mientras está en el útero hasta que nace el bebé.
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