Cómo ocultar al hijo del Emperador
Astella volvió a explicar tranquilamente el por qué.
— En esta situación, me temo que si se corre el rumor de que el Emperador está con alguien que tiene fiebre, las personas que viven alrededor podrían verse sacudidas por la noticia.
No importa cuán bien haya explicado que era una fiebre común, no una fiebre de Ines, los granjeros que no tenían conocimiento de la enfermedad se enfocarían solo en "En la caravana del emperador hay un viajero con fiebre".
Por el contrario, podrían pensar que están intentando engañarlos al ocultar a alguien de la fiebre Ines haciéndole pasar por una fiebre normal.
— Si eso sucede, después de que nos vayamos, este pueblo será marcado como el lugar donde estuvo el paciente con la enfermedad.
Incluso si se propagan tales rumores, los plebeyos no pueden culpar a su benevolente Emperador.
El daño quedaría enteramente en el pueblo.
Incluso si los rumores de que el paciente con la fiebre se ha quedado, podría provocar que los otros aldeanos sintieran rechazo por lo lugareños. Estas aldeas rurales boscosas cultivan hortalizas y ganado, dependen del intercambio de agua con otras aldeas, no podían dejar que tales rumores corran.
El aislamiento del exterior podría dificultar a los agricultores conservar sus cultivos.
— Así que quiero tratarlo en silencio aquí, es mejor eso a que la gente me vea revoloteando por ahí y hablen. También haré una cura para la fiebre. He escuchado sobre la cura muchas veces antes, así que es fácil de hacer si se tienen los ingredientes.
En el este, la fiebre es común, así que aprendió mucho cuando Gretel le enseñó a hacer medicina.
Ni siquiera era una medicina que necesitara ingredientes raros. La mayoría de ellos estaban disponibles en los bosques circundantes. Lo difícil es hacerlo exactamente y con buena calidad.
“Y ... ... también tengo que hacer un medicamento que cambie el color de sus ojos.”
En realidad, el propósito más importante era ese.
Originalmente, pensaba ir y echar un vistazo al pueblo y al bosque con Theor mañana por la mañana.
Sin embargo, la propia Astella se enfermó, y la oportunidad de salir tan naturalmente desapareció.
El medicamento restante le duraría aproximadamente tres días. Si no se recuperaba hasta entonces, el grupo continuará permaneciendo en el castillo, de lo contrario, es posible que no tengan la oportunidad de guardar hierbas y hacer medicamentos.
Dijo que debería hacer la medicinal, y así podía hacer también la de Theor.
Astella terminó tranquilamente su explicación y esperó el permiso de Kaizen.
Sin embargo, la mirada de las personas reunidas en la habitación era un poco extraña.
Todos solo miraron a Astella en silencio.
“¿Por qué hacen eso?”
Cuando Astella se sintió interrogada, Lyndon abrió lentamente la boca con la cara en blanco.
— Eres realmente considerada, Astella.
— ¿Si?
Lyndon se inclinó ligeramente ante Astella.
Parecía realmente conmovido.
— Estoy profundamente conmovido por su consideración de la situación de los agricultores y por nuestra circunstancias.
"No, ni siquiera es conmovedor..."
En realidad, solo quería hacer el medicamento para cambiar el color de los ojos de Theor en silencio. Mirando hacia atrás, el médico de mediana edad que conoció por primera vez hoy, miraba a Astella con ojos de admiración.
Incluso Velian parecía un poco sorprendido.
Sin embargo, algunas personas no estaban muy satisfechas.
— ¿Entonces te quedarás aquí?
— Si.
— ¿Qué pasa con el niño?
El comentario llamó la atención de Theor que estaba jugando con Panqueque en la cama.
Astella volvió a mirar al médico y le preguntó.
— ¿Theor estará bien si duerme en la habitación al lado del pasillo?
— Creo que puedes hacer exactamente eso. Es una enfermedad no infecciosa, a menos que los síntomas empeoren.
Eso es lo que Astella pensó, pero se sentía más aliviada cuando recibió la confirmación del médico.
— Theor, ¿escuchaste eso? Hoy tengo que dormir en la habitación contigua. ¿Puedes hacer eso?
Pensó que podría estar asustado, pero a Theor le pareció interesante tener dos habitaciones.
— ¡Sí! ¡Entonces dormiré con Panqueque en la nueva habitación!
Tenía miedo de no quisiera ir a la otra habitación, pero Theor sorprendentemente estuvo de acuerdo.
Bueno, incluso cuando estaba en casa, Theor fue a la habitación de su abuelo materno y se quedó dormido mientras escuchaba viejas historias.
En este punto, Kaizen no tuvo más remedio que permitirlo.
Miró a Astella durante mucho tiempo con una mirada desagradable antes de verse obligado a aceptar.
— Sí. Haz lo que quieras.
— Gracias, Su Majestad.
Astella miró a Velian.
Velian sintió curiosidad por escuchar a Astella hablar desde un lado.
Astella lo miró, e hizo una sugerencia, como si recién se le hubiera ocurrido.
— Oh, ahora que lo pienso, un farmacéutico vino aquí hace un rato, ¿puedo ir a buscarle y pedir algunas hierbas?
Ante esas palabras, la cara de Velian se puso pálida.
— ¿Dijiste que un farmacéutico estaba aquí?
Kaizen, que no tenía idea de la situación, se dirigió a Astella con una mirada perpleja.
— Si.
Astella sonrió mientras observaba la cara blanca e inocente de Velian.
Velian sacudió la cabeza a toda prisa cuando sus ojos se encontraron.
¿Le está diciendo que no le diga a Kaizen?
Al verlo tan avergonzado, estaba segura que debe haberlo hecho solo sin el permiso del Emperador. Si Kaizen lo sabe, se enojaría porque ha hecho cosas inútiles sin su permiso.
"No siento mucha simpatía."
Velian solía mirar a Astella por mucho tiempo y de maneras interesantes.
Al verla pelear contra Marianne era para él como ver una obra divertida.
Se sentía como si tratara a una persona como una muñeca en un espectáculo de marionetas.
Siempre mirándola con curiosidad... ahora estaba pálido, mirando ansiosamente a Astella.
Se veía muy avergonzado.
Es como si al pobre de repente lo bajaron al escenario del teatro mientras le veían interesante.
Astella dijo con calma.
— Me dijeron que vino al castillo porque no hay suficientes manos trabajadoras. Puso algunas buenas hierbas medicinales en el baño. Está cultivando hierbas, así que quiero ir allí y pedirle algunas.
— Sí, haz lo que quieras.
Kaizen lo permitió con pocas dudas.
En cambio, le adjuntó una condición.
— Pero no puedo dejarte ir sola. Toma un guardia como guía y haz que te acompañe.
— Gracias, Su Majestad. Bueno, entonces....
Después de expresar su gratitud a Kaizen Astella se giró hacia Velian.
Velian la miraba con un gesto nervioso.
"Si no te importa, me gustaría que Velian me guiara"
Kaizen miró a Velian con una mirada perpleja.
— ¿Por qué?
— Quiero hablarte sobre otra cosa.
— ¿Qué tienes que decirle a él?
— Es personal. Velian, ¿está bien?
— Oh, sí, sí — respondió Velian, que estaba de pie con el rostro blanco.
Astella sonrió con indiferencia.
— Muy bien. Prepárate rápidamente.
***
Un momento después, Astella llevaba una pequeña cesta en su camino hacia la puerta trasera del castillo.
Astella revisó las herramientas en la canasta. Dentro de la canasta había pequeñas palas y pequeñas tijeras de podar para cortar ramas. Eran herramientas para recolectar hierbas.
Velian lo seguía con una mirada ansiosa a un paso de distancia.
— ¿Puedo preguntarte por qué querías que te guiara?
Mientras Astella buscaba en la canasta dijo.
— Disfrazaste al farmacéutico como una sirvienta he hiciste que mirara en mi equipaje y cajas de medicinas. Y mientras me enviaron a un baño público incluso le pediste que buscara entre la ropa.
Retrocedió un paso.
— Eso....
— Si tu curiosidad ya ha sido satisfecha, ¿no es tu turno de ayudarme?
Velian miró inexpresivamente y se calló.
Estaba pensando en poner excusas, pero rápidamente se rindió.
— ¿Puedo preguntar cómo lo supiste?
— Sin importar quien la viera la criada era obviamente una farmacéutica, tenía sus manos manchadas de hierbas.— Astella le dijo que había suciedad entre sus uñas.
Además todas las flores de ciruela plateadas secas ya se habían recolectado antes, por lo que no había necesidad de explicar nada más.
Velian dijo con una mirada cansada.
— Cuando Lady Marian abrió la caja de medicamentos, usted notó que la posición de la botella era ligeramente diferente. En ese momento, lo sentí, pero los ojos de Astella son realmente buenos. Eso es un poco aterrador.
— Lo tomaré como un cumplido.
Astella todavía no ha perdido su sonrisa.
Velian miró el semblante de Astella e hizo excusas de vez en cuando.
— Lo siento, pero me he quedado preocupado por lo que sucedió antes. Realmente... solo estaba revisando para saber de qué enfermedad podría tratarse. Nunca tuvo la intención de ser malo....
Realmente no estaba destinado a ser malo. Solo quería aprovechar esta oportunidad para mirar en los medicamentos de Astella y despejar sospechas.
No creía que tendría otra oportunidad de mirar a través de toda la ropa que llevaba puesta a menos que fuera en este viejo castillo. No esperaba ser atrapado.
Se trataba de eso.
— Ya que hasta ayer, Theor no había estado enfermo.
Astella interrumpió fríamente con una sonrisa en su rostro.
— Como te dije antes, Theor suele ser débil. Lo llevaron al pabellón de caza sin decir nada bajo la fuerte lluvia, así que no tuve más remedio que seguirlo. No entiendo qué parecía extraño.
La historia de los suplementos nutricionales fue creada para justificar esta persecución al pabellón de caza, pero ahora ya no va a dudar más porque ha estado buscando en su equipaje.
— Sí, ciertamente lo veo ahora. Todo fue parte de mi malentendido. Lo siento.
La cabeza de Velian estaba inclinada y se disculpó, pero no parecía muy arrepentido. Sintió que simplemente había perdido la energía para intentar justificarse.
— Entonces, ¿por qué no le dijo a Su Majestad?
— Pensé que Velian estaría en problemas si él lo supieras.
— Sí, realmente lo estaría.
Velian estuvo francamente de acuerdo.
Su Majestad estaba muy preocupado por Astella.
Se pondrá furioso si descubre que ha hecho un truco infantil para revisar el equipaje del Astella.
Aún así, Velian quería ver si había algo mal con Theor.
Traducido por MissM
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