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Cómo ocultar al hijo del Emperador


El propio Marqués, abuelo de Astella, había solicitado una audiencia.

Astella no había dado un solo paso fuera del edificio anexo desde el día del baile.

Sin embargo, Kaizen no quería ir allí sin ninguna razón en particular.

Se la había pasado encerrado en su oficina durante ese tiempo.

"¿Debo aprovechar esta oportunidad?"

Kaizen estaba en desacuerdo mientras miraba los documentos.

Después de esperar su respuesta durante mucho tiempo, Velian se dio por vencido y volvió a trabajar.

Solo entonces Kaizen murmuró.

─ Si, no se puede dejar ir al viejo y al niño solos.

─ Así es, tiene razón. Por seguridad, es mejor que Su Majestad vaya con Lady Astella.

Velian rápidamente estuvo de acuerdo con las palabras del Emperador.

Kaizen dejó los papeles y se levantó. 

─ Voy de picnic. Dile a los sirvientes que se preparen.

***

Astella tomó la mano de Theor y salió. Tenía una cesta de picnic en una mano.

─ Tía Astella, ¿Vamos a ir caminando?

─ No, está demasiado lejos, así que tenemos que ir en el carruaje.

Astella, que salió del anexo, se detuvo cuando vio un carruaje frente al jardín.

Los sirvientes llevaban una bolsa de equipaje desconocido en el carruaje.

"¿Qué es ese equipaje?"

Astella salió con una cesta de picnic y algunos cojines enrollables para sentarse en el suelo, y de repente los sirvientes estaban empacando en el carruaje varios bolsas.

Entonces una voz familiar llamó a Astella.

─ ¡Lady Astella! Nos vemos en mucho tiempo.

Era Velian.

─ Conde. ¿Qué es todo esto?

Cuando vio a Velian, sintió una ominosa sensación por alguna razón.

"No creo que haya nada bueno con esta persona."

─ Su Majestad...

─ Lo preparé para ir juntos.

Antes de que Velian respondiera, un tono tranquilo y bajo interrumpió lo que Velian iba a decir.

Girando de asombro, vio a Kaizen caminando hacia ella.

─ ¡Su Majestad!

Theor dejó la mano de Astella y corrió hacia Kaizen.

Kaizen acarició el cabello de Theor.

─ Estás completamente recuperado, por lo que veo.

El suceso del secuestro hizo que Theor se acercara mucho a Kaizen.

Astella se detuvo y observó a Kaizen.

Era la primera vez que lo veía desde el día del baile.

Pensó que sería muy incómodo volver a encontrarlo, pero ahora estaba tan avergonzada que no siquiera tuvo tiempo de sentirse incómoda.

─ Su Majestad, ¿a dónde va? ¿es un picnic?

Ella pensó que tal vez haya escuchado mal, pero Kaizen respondió sin reservas.

─ Sí. Un picnic.

No, ¿por qué demonios? ¿Quién le invitó?

El abuelo, que salió tarde del anexo, vio al Emperador y mostró un rostro perplejo.

─ Me complace ver a Su Majestad, el maestro del imperio.

─ Oh, si. Te ves mucho mejor.

─ Sí, estoy completamente curado gracias a una larga estadía aquí.

El abuelo expresó su gratitud con el mayor respeto y cortesía.

Sin embargo, hubo ira en las últimas palabras porque Kaizen se negó repetidamente a la solicitud del marqués.

Astella se acercó para evitar que el estado de ánimo entre los dos empeorara.  

─ ¿De verdad vienes con nosotros?

Los ojos rojos de Kaizen mostraban signos de disgusto cuando se le preguntó de manera directa.

─ ¿Por qué? ¿No puedo ir?

─ ...

"Así es, no quiero que vengas. Quiero decir eso con franqueza."

Algo así sucedió no hace mucho en el baile.
Después de eso, la solicitud de su abuelo para ver al Emperador fue rechazada, así que no había forma de que Astella mostrara una cara amigable para él.

─ De ninguna manera. Es un honor infinito que Su Majestad pueda ir.

En cambio, inclinó la cabeza, fingiendo dar una sonrisa educada.

─ Pero me preocupa que mi sobrino sea demasiado joven y sea grosero con Su Majestad. Si me lo permite, me quedaré en el edificio anexo con Theor.

Estaba hablando muy cortésmente; pero si quieres ir de picnic ve solo. Nosotros no lo haremos.

Eso es lo que quería decir.

Los ojos de Kaizen se volvieron sombríos.
La ira, molestia y la furia pasaron uno tras otro en los ojos rojos.

"Entiendo que estés enojado, pero ¿qué te pasa?"

Velian interrumpió, mirándolos a los dos.

─ Sabe Lady Astella, no hagas eso. Ve...

Astella trató de ignorarlo.

En ese momento, Theor jalaba del vestido de Astella con un rostro lleno de tristeza.

─ ¿Por qué no vamos, tía? ¿No podemos ir con Su Majestad?

"Oh mi..."

Theor agarró el vestido con su pequeña mano y miró a Astella.

Cuando vio los ojos desesperados, no pudo decir que no.

No perdiendo esta oportunidad, Velian habló nuevamente.

─ El joven maestro quiere ir, así que vamos juntos. El clima es muy agradable. Es un desperdicio quedarse en el anexo.

─ ...

Astella no quería salir con Kaizen sin importar el clima. Suspiró ante la mirada desesperada de Theor.

─ Muy bien, iremos juntos.

Kaizen, que la estaba mirando, dio una pequeña sonrisa.

─ Gracias.

Astella lo ignoró y caminó hacia el carruaje.
Finalmente, el simple picnic al que intentaron ir tres personas: Astella, Theor y su abuelo, se le incluyó también Kaizen y Velian. Se transformó en una salida masiva que incluía soldados que vigilaban al Emperador.

Theor corrió hacia Kaizen, lo agarró de la mano y lo arrastró con él.

─ Su Majestad, también va a ir.

─ Sí, todos vamos juntos.

Astella observó a las dos personas dirigerse al carruaje primero.

El grupo fue al bosque que eran escoltados por los soldados del imperio.

***

El bosque al norte del castillo de Dentz era un bosque hermoso.

Las aguas cristalinas que fluyen desde el Este formaron una corriente a través del bosque.
Los árboles que se alzaban en lo alto del cielo estaban llenos de hojas verdes y hierba suave.

Un picnic en un lugar como este sería muy divertido.

Una comida satisfactoria con un simple sándwich, pastel de carne y vino dulce.

Los niños corren por el bosque húmedo, los adultos se sientan en la hierba, comen bocadillos, conversan...

Un feliz picnic flotaba en la cabeza de todos.

Velian, sentado debajo de la tienda, murmuró en voz baja.

─ Está lloviendo.

La lluvia fría sacudía el bosque.

Definitivamente estaba soleado y despejado cuando se fueron.

Tan pronto como entraron en el centro del bosque como si alguien los hubiera maldecido con algo, la lluvia comenzó a caer.
Tan pronto como fue posible, el grupo sacó la tienda de campaña del picnic, y apenas evitaron la lluvia.

Los sirvientes estaban preparados para usarlo como una cortina de sombra.

Velian levantó la vista hacia la ancha tela sobre su cabeza.

La carpa mal construida se movía peligrosamente cada vez que soplaba el viento.

─ Aún así... me alegra haber traído esto.

Sin esta tienda, todos habrían estado bajo la lluvia.

El carruaje había sido estacionado afuera de la entrada al bosque.

Los soldados que vinieron con ellos también estaban cerca de la entrada.

Afuera, la lluvia era tan fuerte que no podían ver un solo punto.

Una lluvia espesa cayó sobre la tienda.
Era difícil salir al bosque, y mucho menos hacer un picnic.

Theor, aburrido, observaba una pequeña rana plateada al final de la tienda.

La tienda, que estaba mal instalada, temblaba mucho bajo la lluvia y el viento.

El agua de la lluvia que había caído sobre la tienda fluía como una cascada.  

─ ¡Está lloviendo!

Theor había corrido dentro sorprendido.

Astella llamó a Theor.

─ Theor, entra para que no te mojes.

Kaizen, sentado en la tienda, salió.

─ Empezó a llover tan pronto como llegamos al bosque...

Los habías seguido al bosque en un carruaje para hacer un picnic o algo así, y de repente llueve.

Era una situación ridícula.

Kaizen miró hacia Astella, que estaba sentada un poco lejos.

"Iba a tener una correcta conversación con Astella."

Quería caminar por el bosque refrescante y conversar, tener la oportunidad de hablar y contar sobre lo que pasó esa noche.

Pensó que si comenzaba a hablar en un bosque soleado, la atmósfera sería un poco más ligera.

Para ese propósito, hizo este picnic casi obligado, y todo fue en vano.

La lluvia fría y el viento se filtraron a través de las nubes grises.

La lluvia, que caía como un torrencial, fue arrastrada por el viento para llegar al lugar donde estaba Velian.

─ Hiiik....

Velian había huido dentro de la improvisada casa de acampar, con rapidez.

Cinco personas se sentaron en una pequeña tienda y pasaron sus horas juntos.

Theor cogió una rama y comenzó a dibujar en el suelo.

Astella habló y le preguntó a Theor.

─ ¿Tienes hambre? ¿Quieres un bocadillo?

─ Sí tengo hambre.

Astella preguntó a los tres hombres que se encontraban distraídos.

─ ¿Puedo sacar la merienda?

─ Está bien, tengo hambre. Comamos algo.
Pastel de carne y botellas de vino fueron sacadas de la canasta que Velian había traído.

También había un sándwich con un delicioso pollo y una colorida tarta de frutas.

Fue una merienda que el E mperador mandó a hacer porque iba a ir de picnic.

Velian sacó algunas y se las entregó a Kaizen.  

─ Su Majestad, tome algunos bocadillos.

Pero Kaizen estaba mirando a Astella así que no lo tocó.

─ Comamos un sándwich.

Astella tomó un sándwich de la canasta y se lo entregó a Theor.

Era un simple emparedado con jamón y queso.

─ ¡Delicioso!

Theor tomó el emparedado que Astella le dio y los masticó poco a poco.

Astella sacó otro emparedado.

Kaizen extendió la mano sin que él se diera cuenta.


Traduccido por: Anon-chan
Editado por: Miss M

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